jueves, 10 de marzo de 2011

Testeando desodorante

Creo que hoy ha sido el primer desorante RollOn que he comprado en mi vida. Quizás el último, quizás no.¿Por qué? Al quitar el precinto me he encontrado un pelo en toda la bola. ¿Cómo ha llegado el pelo ahí? En el supermercado imposible ya que estaba precintado. La lógica hace pensar que ha sido en fábrica. ¿Por qué un pelo en mi desodorante?

Me gusta pensar que la empresa del desodorante (empieza por N y termina por IVEA) cuida todos los detalles de su producto y que cada uno de ellos es probado por un selecto grupo de sobacos escogidos por un estudio meticuloso. O eso o que el gañan que se dedica a poner el tapón lo haya probado antes de hacer su trabajo. Me decanto por esta última opción. Pero quiero ir más allá. ¿Por qué este trabajador se puso desodorante? Me imagino la situación. 20:00 de un viernes cualquiera. Nuestro anónimo (doy por hecho que es un tío porque una tía con un pelo en la axila me haría replantearme mi sexualidad) ha quedado con un chica justo después de salir de la fábrica y se ha dado cuenta que le canta el ala. Ha mirado a la izquierda, ha mirado a la derecha. Nadie le estaba viendo. De modo ninja, ha cogido el bote y zas zas! Sobacos frescos lo que da lugar a una cita perfecta y la felicidad de una nueva pareja.

Y si algo tan bonito pasó... ¿por qué ahora voy a ser tan escrupuloso de usar mi desodorante?

1 comentario: